Nevada esta mañana en Segovia capital. / Óscar Costa

La provincia de Segovia regresa poco a poco la normalidad tras una mañana complicada por culpa de la nieve. El paso de las horas ha permitido que los dispositivos de vialidad invernal de las distintas administraciones trabajen en las carreteras, lo que unido a la salida del sol y a la finalización de las nevadas ha permitido despejar casi por completo de incidencias el mapa de la provincia de Segovia.

La Dirección General de Tráfico refleja esta tarde que aunque la nieve sigue estando presente en zonas próximas a la sierra de Guadarrama, tan solo es necesario el uso de cadenas o neumáticos de invierno en la CL-601 para subir al puerto de Navacerrada.

Por su parte, el diputado de Acción Territorial de la Diputación de Segovia, Basilio del Olmo, ha confirmado que la red provincial de carreteras está abierta y operativa tras el trabajo realizado desde primera hora de la mañana por cinco equipos de operarios y maquinaria, aunque se pide a los conductores que circulen por precaución en zonas de montaña por los montones de nieve acumulados en los márgenes tras el paso de las quitanieves.

Una mañana muy intensa en la que la Diputación tuvo que reaccionar ante la intensidad y fuerza de la nevada que estuvo muy por encima de las previsiones y los avisos anunciados. Se tenía previsto dos camiones para actuar en la zona de Prádena y de El Espinar, durante la madrugada y a partir de las 7:00 horas, fue necesario activar otros tres camiones para despejar las carreteras provinciales, informa Ical.

Además de la maquinaria, trabajaron entre 35 y 30 personas de Acción Territorial, según los datos aportados por Basilio del Olmo. Los esfuerzos se centraron en la falda de la sierra de Guadarrama, en los municipios de El Real Sitio de San Ildefonso, El Espinar, Torre Val de San Pedro, Pedraza o Prádena, entre otros, donde por su altura las nevadas son más cuantiosas.

En Segovia capital la nieve desapareció casi por completo a primera hora de la tarde y ni siquiera en tejados o jardines queda rastro del manto blanco que cubrió la ciudad durante buena parte de la mañana.